Estuve anoche viendo cómo llegaban tras su largo peregrinar.
No tengo palabras, solo puedo sumar una ristra de adjetivos:
Emotivo, reflexivo, solemne, participativo, respetuoso, religioso, humano, digno, precioso, cercano, plástico, compartido, la piel de gallina...
A quien no lo haya visto nunca, se lo recomiendo, vale la pena por lo mucho que le aporta a uno ese rato de dignidad y humildad.
¡Bella tradición!
No hay comentarios:
Publicar un comentario