Día emotivo , ayer...
La vida da muchas vueltas, uno empieza a trabajar con un grupo de personas que de pronto y con el tiempo, se convierten en parte intensa de su vida.
Personas que comparten cada día muchas horas de convivencia, personas a las que se les toma cariño y de las que uno va llenándose el corazón. Es verdad, que después, algunos parten, otros llegan, pero al final todos pasan a formar parte de nuestros respectivos yo.
Ayer nos reunimos unos cuantos compañeros para comer en camaradería y decirnos, sin hacerlo demasiado evidente, por ese pudor que tanto nos atenaza, cuanto nos vamos a echar de menos unos a otros. Y es que la vida nos obliga, muchas veces, a renunciar a grandes querencias cuando pretendemos seguir creciendo y persiguiendo nuestro objetivo personal. Esas cosas dejan de estar ahí, en el día a día, pero no por eso desaparecen. No que va, se anclan en nuestro ser y conforman ese poso que va transformándonos con el tiempo.
Así pues, queridos compañeros de exportación, queridas compañeras Rosa, Marian y Rosana y todos los demás que no cito pero que no por ello dejo de tener en mi pensamiento, gracias, gracias por todos estos años que me han permitido aprender tanto de vosotros, profesionalmente y sobre todo humanamente.
Os quiero y hasta siempre, mejor, hasta pronto.
Durante la vida vamos conociendo muchísima gente. pero realmente solo unos pocos nos llegan al corazón y nos acompañan durante la vida.
ResponderEliminar¿porque pasa esto?
porque comparten con nosotros su experiencias, nos aconsejan, nos apoyan o simplemente nos escuchan…
por eso cuando los caminos se parten uno a veces no intenta esconder estas lagrimas que pueden decir mucho más que palabras.
YO tengo que decir Gracias.
gracias por acompañarme durante todo este tiempo.
gracias por compartir y escuchar.
menos mal que no es un adiós, simplemente un hasta pronto.
un abrazo