¿A qué temen en realidad?

Creo que me he despistado un poco entre tantas declaraciones de los diferentes responsables políticos, cada una de ellas con sus matices y estilos. Lo digo, por la detención del Presidente de la Diputación de Alicante.

Ipso facto, hemos tenido la consabida y legitima lista de opiniones, afirmaciones, negaciones, proclamas, arengas, etc. Pero hay una en especial que me llama la atención y no por original ni por inusual, al contrario, de pronto, me he parado a pensar en el porqué.

Las declaraciones de nuestro President de la Generalitat a los medios…De nuevo, la famosa presunción de inocencia… ¿cuantas veces habrá tenido que acudir a esta socorrida frase en los últimos tiempos? ¿Cuántas veces habrá tenido que hacer de tripas corazón y con una más que ensayada sonrisa, salir a la palestra?

Pero lo realmente interesante de la dichosa frase es el motivo.

¿Podría ser por una fe inquebrantable en el sistema jurídico positivo que nos hemos dado? Lo dudo. El President sabe perfectamente que nuestro ordenamiento jurídico en su puesta en práctica, en estos momentos, es papel mojado. Pensemos en la elección de los miembros del CGPJ o del TC. Sí, aquello de progresistas, conservadores, nacionalistas…o por ejemplo, en el tiempo que tarda un juzgado en poner una sentencia…

¿Podría ser porque esté convencido de la honorabilidad de su compañero de partido, que no de corriente? Me da la risa, están a muerte dentro de lo que es la organización interna del PP valenciano, no hace falta recordar el apego del Sr. Ripoll al ex President Zaplana y sus últimos posicionamientos con respecto a Camps y la trama Gürtel. Son todo, menos colegas. Me imagino a Camps, en estos momentos, con un angelito en su hombro derecho (lógico, siendo el partido que es) aconsejándole que no deje tirado a Ripoll y un diablillo a su izquierda (también, lógicamente) provocándole para que lo deje en la estacada…difícil tesitura, jajajaja.

Dejando bromas aparte, personalmente y esto es lo que me desespera y al mismo tiempo me alienta a más no poder en el camino emprendido por UPyD, creo que lo que realmente le preocupa al President, en el fondo como a tantos otros, es el poder. Perder el poder. Esto es, ciertamente, lo que temen nuestros ilustres políticos de tortuosa trayectoria.

El calculo, es muy importante, ya estará la maquinaria del PP en pleno, estimando el daño que les ha podido causar la detención de Ripoll. No les interesa el porque de la detención, ni el cómo se ha podido llegar a ese punto, no. Lo que verdaderamente importa ahora, es saber si podrán seguir en el poder o no. Como dijo su secretario general en la CV cuando Gürtel, tienen la “adhesión de los valencianos”. No les interesa el raciocinio de los valencianos, ni su criterio objetivo, ni la persecución de la corrupción, no, que va, les interesa “la adhesión” como en los mejores tiempos del caudillo y la plaza de Oriente.

Y por eso alegan la presunción de inocencia, es un formalismo más, un modo de ganar tiempo aún cuando saben que su batalla está perdida, es como cuando en un combate de boxeo, el que va perdiendo se abraza al vencedor para ganar oxigeno al mismo tiempo que le impide que siga golpeando. Han sucumbido en la más importante, la batalla de la honestidad frente al ciudadano. Y en frente, tenemos una oposición absolutamente inoperante , que también estará echando cálculos, por si acaso se produce el milagro y mediante estos atajos inesperados, recuperan algún escaño, que es, claro está, lo más importante.

Seguro que ahora el PP convertirá la detención en un atentado contra los valencianos de bien, en una persecución política del gobierno central, en un martirio en nombre de la nación valenciana, etc…y seguramente acabaremos recordando el problema del agua…de lo marginados que estamos…de lo bien atendidos, en cambio, los catalanes…

La realidad, la cruda realidad, es que hay unos señores que con toda complicidad, presuntamente, han utilizado su posición privilegiada para favorecer a otros señores que en contrapartida algo habrán hecho o dado. Una posición que erróneamente piensan sea de su propiedad y que olvidan que, al final, no es más que un préstamo de la sociedad valenciana, de cada uno de los votantes. Con fecha de caducidad y sometido a la ley. Esa ley que intentan burlar riéndose de nosotros.

Por eso estoy en UPyD, por eso creo en este grupo de ciudadanos que con voluntad “ higienizante”, ansiosos de nuevas formas, se han unido, deseosos de cambiar las cosas de verdad. Ni de derechas ni de izquierdas, simplemente ciudadanos honestos. Nos llaman algunos, con tono despectivo, políticos amateurs…muy honrados por ello.

Es necesario que se reinicie y se recobre la confianza en las instituciones y ello pasa por nuevos modos, nuevas ideas y sobre todo, por devolver a la sociedad el control y dirección del contexto cívico. Hemos cedido el mando a personas que no siempre han estado a la altura de las circunstancias. Es hora de una alternativa posible y necesaria.
Un cambio que aporte transparencia a la administración, que elimine favoritismos, que piense en lo que realmente interesa a la sociedad, que gestione el dinero como si fuese suyo y no como si viniese de un papá derrochador y consentidor. Que la lógica y la coherencia se implanten de nuevo como moneda corriente.

La presunción de inocencia tiene por objeto que nadie sea condenado sin pruebas, que todo ciudadano sea libre e inocente mientras no se demuestre su culpabilidad. Su objetivo no es ganar tiempo para evitar desgastes electorales. La presunción de inocencia no puede ser contaminada por un mal uso en su aplicación…

Cuantas veces me acuerdo del famoso voto útil…especialmente en estos momentos… ¿donde está la utilidad para aquellos que votaron a estos señores?